El consumidor no quiere que lo interrumpan con publicidad. Quiere que lo sigan llenando de contenido y entretenimiento.
En su momento mostramos el ejemplo de Heineken. Luego el de LifeFitness. ¿Y por qué no, el de GoPro también?
Ahora uno mucho más exagerado, casi llevado al extremo.
El whisky Ballantine's propone manifestaciones artísticas en vivo desde Facebook con participación online de los seguidores. Nos una publicidad, casi no aparece la marca, tampoco el producto. Es contenido casi puro pero generado por ellos y donde ellos quieren.
En esta entrega crearon el primer tatuaje interactivo de la historia. Y en su perfil de Facebook ya está la cuenta regresiva para el arte graffitero que se vienen.
La realidad es que la acción en sí misma, no me pareció tan buena pero destaco que una marca se anime a ir por tanto cuando hablamos de contenido... Quizá fue demasiado, ¿no?
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