Todo logo debería someterse a un lifting al cumplir aproximadamente los tres años. Superados los cinco, ya habrá alcanzado su mayoría de edad y será extremadamente viejo. La velocidad de la información actual obliga a refrescarlos cada vez más seguidos. Sutilezas, detalles, refinamientos, muchas veces casi imperceptibles al consumidor, pero que alimentan una evolución necesaria.
En su momento, posteé que en términos de diseño hay un antes y un después del Ipod. La evidencia quedó a la vista. Hoy me encontré con BrandNew, una interesantísima página que analiza y comenta las actualizaciones de los logos, y que recomiendo para profundizar sobre los ejemplos que aquí se exponen.
Todos los isologotipos van a lo mismo: un iso moderno, simple, que connote tecnología y que parece casi un icon de software o internet; una tipografía sans serif muy nítida, sencilla, mucha minúscula. He aquí algunos ejemplos de los últimos dos años (todos via BrandNew).
¿No parecen todos iguales?
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